¿Seré buena madre/padre? ¿Criaré a mi hijo como me criaron a mí? ¿Cómo me gustaría que fuera mi hijo? Son algunas de las muchas preguntas que nos formulamos antes y una vez que nos convertimos en padres. Las respuestas van en relación directa a nuestras expectativas y en muchos casos a las de nuestra familia. Pero ¿qué repercusión tienen las expectativas en nuestro rol de padres? ¿y sobre la vida de nuestros hijos? "Expectativas que surgen en torno a ser padres", es el tema de hoy, y que es abordado a través de un interesante artículo que nos presenta nuestra autora invitada, la Psicóloga María Gutierrez Raposo (Madrid- España), especialista en terapias de familia, pareja, adolescentes y niños. Los dejo con ella.
Una de las preguntas que en algún momento de la vida se hacen todas las personas es acerca del deseo de ser padre o madre. No siempre es una respuesta fácil de responder y hay quien necesita un tiempo para dar con ella. Por supuesto, hay quien decide no serlo, lo que sería totalmente respetable y quien puede tenerlo muy claro desde mucho tiempo atrás.
Este
post va dirigido a aquellas personas que se hayan decantado por la idea de ser
padres, y les ayude a sentirse identificados con algunas de las expectativas
que pueden surgir en torno a la paternidad/maternidad.
Cuando
nombro la palabra expectativa me
estoy refiriendo a tener la esperanza de
que algo suceda, deseos, ilusiones, fantasías, anhelos, propósitos, sueños…
Voy
a hablar de tres grupos de expectativas:
- Las expectativas que ese futuro padre o madre se planteará acerca de su nuevo rol.
- Las expectativas que se van a depositar sobre el futuro bebé.
- Las expectativas que provienen del entorno familiar (abuelos, tíos, hermanos…)
EXPECTATIVAS ACERCA DE CÓMO SERÉ COMO FUTURA MADRE O PADRE
Construirse la imagen de futura madre o padre implica una revisión de otro lugar en la familia que hasta ahora ha tenido un mayor peso que es el de HIJO. El lugar de hijo pasa a un nivel secundario porque el rol de padre necesita tener más espacio.
Hay preguntas que podemos formularnos de manera más consciente o inconsciente como son: ¿Qué padre/madre voy a llegar a ser? ¿Me gustaría parecerme en algo a los míos? ¿En qué me gustaría parecerme? ¿Y en qué no querría repetir según mi experiencia como hijo/a? ¿Seré un buen padre/madre? ¿Seré permisivo o autoritario, seré cariñoso o más distante, atenderé a sus necesidades emocionales o las emociones no tendrán tanta importancia?
EXPECTATIVAS SOBRE MI FUTURO BEBÉ
Desde el momento en que se toma la decisión de tener un bebé se crea un MUNDO IMAGINARIO acerca de cómo será. Normalmente las expectativas de los padres van a ir en un sentido positivo, por ejemplo, en pensar que el futuro niño/a nacerá sano. Algunas de las primeras preguntas que surgen son:
- ¿Qué sexo será?
- ¿Cómo vamos a llamarle?. La historia del NOMBRE es muy interesante de analizar y reflexionar, ya que en algunas ocasiones, los padres eligen nombres porque les gusta simplemente, les trae buenos recuerdos, lo asocian a personas importantes para ellos. En otras ocasiones, implica continuar con un legado familiar: “Todos los varones que nacen en primer lugar se llamarán José”. O bien porque se depositan características en dicho nombre: “¿Significará lo mismo llamar a un niño Arkaitz (cuya traducción literal es “Roca”) que llamarle Angustias?”. Especial atención merece un miembro fallecido en la familia, y cuyo nombre se repite en un nuevo nacimiento. ¿Qué mensajes inconscientes se estarán trasladando al nuevo miembro de la familia?
- ¿Cómo será su apariencia física? ¿Se parecerá a la madre o al padre?, ¿O a los abuelos? ¿Esto puede ya relacionarse con alguna característica de la persona a la que se parece?
EXPECTATIVAS DE MI ENTORNO FAMILIAR SOBRE MI NUEVO ROL O SOBRE EL BEBÉ
La
familia extensa también guarda un papel importante a la hora de construir ese “BEBÉ IMAGINARIO”, ya que también fantasean
con “que sea un varón porque sólo tuvimos hijas”, “que sea niña porque así
podrá jugar más con las primas”, “ahora los abuelos llenarán un vacío y estarán
entretenidos”…
Cada familia tiene su propia historia, sus vivencias y experiencias, su sistema de valores, su manera de comunicarse y su manera de relacionarse y manejar emociones entre ellos.
Los padres como las familias poseen deseos y expectativas que en ocasiones están a un nivel inconsciente, y que pueden trasladarse al futuro niño/a en forma de mandatos u obligaciones. Serían atribuciones o etiquetas acerca de características o modos de pensar, sentir y comportarse.
Existen padres y familiares capaces de aceptar que el menor puede no llegar a ser como a ellos les gustaría, pero aún así, se preocupan por conocerle, por fomentar sus recursos y capacidades. Si esto es así, podrán mandar mensajes del tipo: “VIVE”, “DISFRUTA”, “APRENDE”, “NO TENGAS MIEDO POR EXPRESARTE”, “ELIGE TU CAMINO”… y estos padres serán acompañantes y guías de sus hijos.
Pero inevitablemente tengo también que hablar de otro grupo de padres y familiares que no están preparados para cambiar sus propias expectativas y trasladan al menor mandatos y obligaciones del tipo:
- “NO LLORES, SÉ FUERTE”: este mensaje dificulta contactar con emociones como puede ser la tristeza.
- “SÉ EL MÁS LISTO DE LA CLASE, SÉ PERFECTO”: el menor no puede permitirse fallar, equivocarse porque sentirá que decepciona a sus familiares.
- “LAS NECESIDADES DE LOS DEMÁS SON MÁS IMPORTANTES QUE LAS TUYAS, COMPLACE”: se acostumbra a creer que sus necesidades no son importantes, y puede tener dificultades para contactar con sus deseos, y prioriza los de los demás frente a los propios.
- “SÉ BUENO, NO HAGAS EL MAL”: la emoción que aquí se está reprimiendo es la del enfado.
- “SÉ RESPONSABLE”: esta frase dirigida a niños les saca de su infancia, son niños que de pequeños ya parecen adultos.
- “MANTÉNTE COMO NIÑO Y NO CREZCAS”: hay padres a los que les es difícil asumir y aceptar que sus hijos crecen y que les necesitarán cada vez menos, y les gustaría que siempre fueran niños para poder cuidarles.
Como conclusión a este post, recordar que las expectativas siempre existen, lo que será muy importante es ajustarlas y regularlas, ya que tras el nacimiento, hay bebés que nacen con características muy diferentes a la que sus padres y familiares les habían comenzado a atribuir, y pueden sentirse decepcionados y frustrados. Dependerá de sus recursos internos y externos para superar dichas emociones. Por lo tanto, mi mensaje sería: “Desea y espera, pero siempre con la posibilidad de flexibilizar dichos deseos cuando la realidad esté frente a ti”.
Si deseas conocer más sobre la Psicóloga María Gutierrez o ponerte en contacto con ella, puedes visitar su sitio web mariapsicologamadrid.
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Hola! Me gusto mucho el post, aun no tengo nenes y falta para que los pueda tener. Tengo cosas claras de como quiero educarlos o como me gustaria porque hasta que no me vea en esa situación no tendre las cosas claras o por lo menos es lo que me dice: " eso lo dices ahora, ya cambiaras de opinión cuando tengas uno"
ResponderEliminarEso si en mi casa todos esperan a que yo, mis hermanas o mis primas tengamos un niño porque somos todos chicas! Un beso
Lo que dices es cierto, solo hasta que nos convertimos en padres tomamos consciencia de las la gran responsabilidad que significa tener un hijo, reevaluamos muchas cosas y hasta parece que todo lo que creíamos saber desapareció. Es importante entonces la comunicación con la pareja para afianzar o replantear juntos el estilo de crianza que buscan para sus hijos, para apoyarse mutuamente y anteponerse ante cualquier situación como pareja y como nueva familia.
EliminarRespecto a lo que espera nuestra primera familia (o la de nuestra pareja) es lo más común que manifiesten también sus sueños y deseos sobre un futuro bebé, aunque no debemos olvidar que son solo eso, una expresión del deseo de ser parte de este acontecimiento tan importante como lo es la llegada de un nuevo miembro a la familia, pero hay cosas sobre las que no podemos actuar, como la elección del sexo del bebé y cosas sobre las que solo compete actuar a los padres.
Muchas gracias por tu comentario, un abrazo muy fuerte.
Hola!
ResponderEliminarCreo que lo niños son un reflejo de los padres .Y efectivamente para los padres los hijos serán siempre niños
Bss
Creo también que los hijos son reflejo de sus padres, los padres son el modelo, y enseñamos más con nuestras acciones que con nuestras indicaciones, y esto es más evidente cuando se trata de niños pequeños. La infancia es una etapa hermosa de la vida que no quisiéramos que pase, pero no podemos evitarlo. Pienso entonces que es mejor disfrutarla al máximo, nosotros como padres disfrutar al máximo de ver a nuestros niños descubrir el mundo, de maravillarnos con la pureza de su corazón, amarlos y protegerlos todo cuanto sea posible y nuestros peques, jugar, aprender, y reir a carcajadas, porque el tiempo pasa volando y cuando menos lo pensemos nuestros niños ya estarán listos para alejarse de nosotros.
EliminarCuántas preguntas se hace uno durante el embarazo, eh? Y luego mientras crecen todo son cuestiones que año tras año van madurando a medida que el pequeño crece. Mi hijo cumplirá 12 en breve y hoy las dudas y preguntas que me hago no han dejado de cesar ... y creo que nunca dejarán de hacerlo. Será que ser madre es ésto, tamién.
ResponderEliminarLas dudas y autoevaluación constante creo que son tan naturales como necesarias cuando se busca criar adecuadamente a los hijos, lamentablemente también cierto grado de culpa y ésta es precisamente la que aparece cuando la forma en que venimos actuando no resulta ser de la forma como lo habíamos deseado... se trata en todo caso de la actitud que tomamos frente a esos deseos no logrados sobre nuestro forma de criar reflejada en nuestros hijos.
EliminarCreo que sí es bueno tener expectativas en cuanto te motiven a ser mejor, a hacer un mejor trabajo, pero deben ir de la mano de la flexibilidad, apertura y total libertad de desarrollo de nuestros hijos como personas totalmente independientes a nosotros.
La verdad que creo que todos pasamos por los mismos miedos e inseguridades y a mi parecer nunca acabas de aprender qué es lo mejor o si lo haces bien o mal.. yo creo que eso más bien es un exámen a largo plazo y sólo cuando veas en qué se ha convertido tu pequeñ@ sabrás más o menos cómo lo hiciste. Personalmente todos los días aprendo algo y seguramente todos los días me equivocaré pero lo hago lo mejor que puedo y, sobre todo, lo hago con muchísimo amor. Muaks
ResponderEliminarEse es precisamente el submensaje de este post, apreciar nuestro presente y hacer nuestro mejor esfuerzo. Como padres, solo podemos hacer eso, entregarle lo mejor de nosotros a nuestros hijos y educarlos lo mejor que podamos, hasta cierta edad, en la que tomarán sus propias decisiones y asumirán las consecuencias de estas. No sabremos que nos deparará el futuro, ni a nosotros ni a nuestros hijos, no podemos trazarles un camino de vida para que ellos sigan, solo podemos amarlos, aceptarlos y apoyarlos todo cuando la vida nos permita.
EliminarUn abrazo!!
Es cierto desde que me enteré que iba ser madre mi vida ha sido una constante de expectativas, ahora estoy en la etapa de la secundaria con uno y aun en primaria del segundo, ya se acerca el tiempo de que mi hijo mayor vaya pensando o fantaseando con aquello que desea ser en su vida profesional y obvio yo también tengo mis propias expectativas, mi familia y la de mi esposo seguro tiene la suyas lo único que sé que mis hijos siempre contarán con mi apoyo.
ResponderEliminarY es precisamente lo que nuestros hijos a lo largo de toda su vida, siempre necesitarán de nosotros, saber que cuentan con nuestro apoyo. Un abrazo muy fuerte!!
Eliminar¡Buenas tardes! ¿Sabes lo que le diría yo a todos los futuros papás y mamás? Que hagan la experiencia suya y que no se dejen influenciar. Muchas veces, la familia se intenta meter por medio y lo único que hace es dificultar el camino. Obviamente, el hecho de ser padres va a estar lleno de expectativas. Pero creo que esas expectativas no deben condicionar a la toma de decisiones. Me explico: una amiga ha empezado a buscar colegio para su hijo (no ha ido a una escuela infantil antes) y sus padres ya se creen que va a ir al mismo colegio religioso y concertado al que fue ella. Vamos, que lo dan por hecho (ella quiere llevarlo a uno público). Se siente mal porque no sabe cómo decírselo a sus padres cuando no debería por qué porque es su decisión. ¡No sé si me explico! :D
ResponderEliminarLas expectativas que tiene la familia sobre determinados aspectos de la vida de nuestros hijos, siempre existirán y en diversos grados. Creo, particularmente que las opiniones (que surgen de sus propias expectativas) pueden aportar mucho siempre que ambos padres las soliciten y tengan la apertura para escucharlas sin considerarlas una intromisión a su forma de crianza y decisiones. Es importante establece límites dialogando con ambas familias lo más temprano posible para evitar situaciones incómodas. Toda la decisión sobre la crianza y educación y cualquier aspecto de la vida los hijos es solo competencia y responsabilidad de sus propios padres.
EliminarMuchas gracias por tu comentario, un abrazo!!
Ciao, io sono Mamma di una bimba di 7 anni, che dire essere genitori è una sfida continua, hai sempre paura di sbagliare ma il cuore quello non sbaglia mai, seguilo e ti porterà sulla giusta strada <3
ResponderEliminarHola Anna, coincido contigo completamente. El amor es la mejor guía en la crianza de nuestros hijos. El amor por ellos también nos lleva a evaluarnos constantemente, y a buscar ser mejores padres y verdaderos modelos para ellos. Creo que desde que uno se pregunta si está siendo o será buen padre/madre ya está en camino de serlo.
EliminarMuchas gracias por tu comentario, un abrazo muy grande!!
Lo más bello es ser mamá sea de tu vientre o no. Es un privilegio poder educar y estar hay en ese momento junto a su crecimiento. Yo tengo dos y ni lo cambio por nada
ResponderEliminarPienso y siento igual que tú Marcelle, la dicha de ser madre no se compara con nada. Hay momentos de locura, intensos y dolorosos, pero aún así la felicidad que otorga ver crecer a nuestros hijos, educarlos, formarlos, ser parte de sus vidas, nos llena de felicidad. Un gran abrazo!!
EliminarMe encantó que en unas pocas líneas hayáis tenido la capacidad de sintetizar tan maravillosa experiencia. Creo que el artículo es una delicia. Saludos!
ResponderEliminarCreo lo mismo Denitsa, ha sido muy grato contar con el aporte de nuestra invitada la Psicóloga María Gutierrez. Estoy segura que muchos padres nos hemos sentido identificados con una o más situaciones expuestas en el artículo.
EliminarMuchas gracias por tus palabras, un abrazo!